Un grupo de estudiantes de secundaria de robótica y un veterinario se han unido para mejorar la vida de un gato llamado Flipper. Flipper era incapaz de caminar en sus cuatro patas a causa de su malformación física. El Dr. Harry Gurney en la Clínica Veterinaria Parque de Aspen en Colorado explicó el desafío único de Flipper: "Nuestro problema era la médula espinal se retorció como un cable telefónico, de modo que mientras la mitad del cuerpo iba hacia adelante y la otra mitad del cuerpo iba hacia los lados." Flipper estuvo a punto de ser sacrificado, hasta que el club 'Blitz Robot' de la Escuela de Secundaria Conifer entró en escena. Se esperaba que en el largo plazo, los médicos fueran capaces de restaurar la comunicación a través de toda la médula espinal de Flipper, por lo que la función completa volvería. Sin embargo, para el corto plazo, el club de robótica se propuso crear una especie de "caminador" inteligente para darle a Flipper una mejor movilidad mientras la terapia física seguía en curso.
Sorprendentemente, Flipper se adaptó rápidamente a su nueva ayuda, corriendo alrededor de la clínica veterinaria. Ahora se espera que las patas que Flipper se hargan más fuertes, y se pueda arreglar su columna vertebral para que le permita usar sus patas traseras.

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